miércoles, 18 de noviembre de 2009

La Sábana Santa


También conocida como Síndone o Santo Sudario, se encuentra en la capilla real de la Catedral de San Juan Bautista de Turín. Algunos la consideran como el mayor tesoro de la cristiandad, por la razón de que es Cristo, y no otro, el que está reflejado en esa sábana. También están los contrarios a esta posibilidad que apoyan la teoría de que estamos ante un fraude realizado en la Edad Media.
Cuando la Sábana había dejado de crear interés entre los cristianos por las dudas acerca de su autenticidad, el fotógrafo italiano Secondo Pia decidió hacerle una fotografía para el recuerdo, los resultados obtenidos volverían a abrir el debate. Tras obtener el negativo, este observó que la imagen del hombre que dejó ahí su impronta salía en positivo, es decir, la imagen del cuerpo era más clara en el retrato fotográfico. Con el paso del tiempo y los numerosos estudios de la reliquia se ha demostrado que estamos ante una imagen tridimensional (sólo es posible realizarlo con un ordenador) y que el cuerpo que cubrió la sábana había sufrido unos castigos muy parecidos a los que tuvo que soportar Jesús hasta que murió en la cruz. En un análisis más exhaustivo, se pueden apreciar marcas hechas durante la flagelación con artilugios de la época romana, además las monedas colocadas en los ojos de ese hombre corresponden al periodo Bizantino y las manos tienen cuatro dedos, al tener los pulgares plegados por la crucifixión. Hay que resaltar que sólo tras los avances en medicina se ha podido revelar que los clavos, en la época romana, se ponían en las muñecas y no en las palmas de las manos -algo que no se solía incluir en los frescos del Medioevo-.
En el año 1988 se llevó a cabo la prueba del Carbono 14 que databa a esta reliquia de ser creada entre los años 1260 y 1390 d. C. Esta noticia desanimó en cierta medida a los creyentes, ya algunos estudiosos defienden la fiabilidad de dicho método. A este dictamen científico, se le añade el documento escrito por el obispo D'Arcis, al Papa de Aviñón en 1389, donde cuenta que unos sacerdotes consiguieron una tela pintada con el fin de engañar a la población.
La reliquia apareció en 1350, hasta entonces era prácticamente desconocida, algo que puede crear sospechas, sin embargo, existen legajos y documentos en los que se cita la existencia de una tela en la que se aprecia una imagen que puede estar relacionada con la Sábana Santa de Turín, y por lo tanto que corroboran su existencia antes de la fecha establecida por el Carbono 14.
La posible teoría que explica que en los años posteriores a la muerte de Jesús no se hable de esta tela, es porque una ley judía designaba como impura cualquier cosa que hubiera estado en contacto con un cadáver. El culto a la tela, por lo tanto, quebrantaría una ley judía.
Se tiene constancia de que en la tela de Edessa (también conocida como Mandylion) se veía el rostro de Jesús, podrían ser los primeros vestigios del Sudario de Turín (S.VI). Edessa fue la primera ciudad cristiana, aunque años después retornó al paganismo. Se cuenta que su Rey, se curó de una enfermedad cuando entró en contacto con dicha tela. Años más tarde, los cristianos de esta ciudad al ser perseguidos, escondieron la reliquia en la muralla de la ciudad donde quedó olvidada durante siglos. Quinientos años después, se descubre por accidente y la consideran como una obra no realizada por el hombre, de hecho existe una pintura bizantina que recoge ese momento. El Rey de Edesa. Agbaro de Edesa sostiene en sus manos una tela en la que se aprecia el rostro de un hombre. En Grecia se hablaba del Tetradyplon (doblado en cuatro partes).
A lo largo de los años, los artistas dibujaban a Jesús de muy diversas maneras, como el buen pastor, a veces sin barba, etc; ya que por entonces, no tenían ni idea de cómo era el aspecto de Jesús. Fue con el descubrimiento del Mandylion cuando, de alguna manera, se extendió el retrato de Jesús como lo conocemos actualmente. No obstante, se conoce el primer retrato de Jesús en el S. VI y es exacta a la de la Síndone turinesa.
El ejército bizantino rescató la Síndone de los musulmanes en Edessa y la trasladaron a Constantinopla. Algunos expertos afirman que la tela estaba doblada (Tetradyplon) para que no fuera considerada un ídolo pagano, aunque algunas veces se mostraba en su plenitud para que todos la observaran. Un soldado francés al hablar de ella, en pleno S.X, la definió como una talla plegada para que todos vieran la imagen de nuestro salvador, utilizó el término Síndone (Sudario). Tras la invasión de la ciudad, en el año 1203, el mandylion desapareció, se cree que se llevó junto con los demás objetos de valor hacia Francia. Posteriormente, hay indicios que acercan el Sudario a los Caballeros de la Orden del Temple o Templarios, quienes rendían culto a una especie de cabeza humana grabada en una tela, que tenía semejanza con el Mandylion.
La historia más reciente, de lo que hoy conocemos como Sábana Santa, comienza en Leroy (Francia, S. XIV), su propietario era una persona importante en la época y con una gran fortuna.
Dos cosas para finalizar este interesante paseo por la posible historia de la Sábana Santa de Turín:
-El Carbono 14 es un método arqueológico de datación que se encarga de medir la edad de la materia orgánica mediante la radioactividad de ese isótopo del carbono. Según esta prueba, la Sábana es de un periodo comprendido entre 1260 y 1390 d. C. Algunos científicos defienden este método, sin embargo, otros no. Posiblemente el incendio al que sobrevivió la Síndone en 1532, junto a otros elementos han podido afectar dichos resultados. Un dato a tener en cuenta, es que llega a tener un margen de error de hasta 1500 años. Al realizarle esta prueba a una momia, los huesos según el carbono 14, eran 1000 años más antiguos que la tela que los envolvía.
-Datos de la Sábana Santa: es una tela de lino que mide 4'40 de largo y 1,10 de ancho, en ella se puede ver reflejado a un hombre de cerca de un metro ochenta que presenta todos los signos de la Pasión.
¿La Sábana Santa: realidad o fraude? ¿Es posible que con los conocimientos existentes en la Edad Media se pudiera crear una falsificación con tal precisión? ¿Estamos ante la sábana que cubrió el cuerpo de Cristo?
Fuentes: Revista Más Allá, Año Cero, Milenio 3, Misterios del Pasado.
http://video.google.com/videoplay?docid=-8661485618613559603#

1 comentario:

  1. Puf!yo soy cristiana y creo lo de la sábana santa. A parte me fascina como el cuerpo de un hombre puede perdurar y pasar por época de guerras y no sufrir en absoluto. Eso debe de ser que es algo tan importante que merece la pena conservar..
    Me ha parecido super interesante la noticia.

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